Hoy en clase hemos conocido un poco más el procedimiento que los romanos utilizaban a la hora de construir las ciudades en la que habitaban, como nuestra antigua Caesaraugusta.
Así, lo primero era construir la muralla, que cumplía un doble propósito: definir el perímetro de la ciudad y actuar de defensa ante posibles ataques. En Zaragoza todavía se conserba parte de la muralla romana.
A continuación trazaban dos calles perpendiculares, el cardo (de norte a sur) y el decumano (de este a oeste) y en el punto donde se cruzaban, construían el foro: lugar de encuentro y gobierno de las ciudades romanas.
En nuestra ciudad el foro se construyó más próximo al río por su importancia comercial. Sus restos los podemos ver en el museo del foro, en la Plaza La Seo.
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